Acercándonos al Big Data

Cada día es más frecuente que escuchemos el término “Big Data”, pero ¿sabemos realmente a qué se refiere?, ¿ las empresas españolas están implementando este tipo de soluciones?, ¿se trata de una nueva moda informática?.
El concepto de Big Data no es algo nuevo, existe desde hace años, pero sin duda hoy en día está de moda. Una moda que viene para quedarse y que, sin saberlo, ya forma parte de nuestras vidas. Este anglicismo viene a definir todas aquellas tecnologías y servicios que nos permiten gestionar y analizar ingentes volúmenes de información que sin darnos cuenta generamos y que, con las herramientas tradicionales, nos resultaría imposible. Para hacernos una idea de la situación, en 2020 más de 30 mil millones de dispositivos estarán conectados a internet y la previsión de crecimiento de los datos es de casi 40ZB (zetabyte). En apenas un minuto, en Internet se generan 4,1 millones de búsquedas en Google, se escriben 347.000 tweets, se comparten 3,3 millones de actualizaciones en Facebook, se suben 38.000 fotos a Instagram, se visualizan 10 millones de anuncios, se escuchan 32.000 horas de música en streaming, se envían 34,7 millones de mensajes instantáneos por Internet o se descargan 194.000 apps.
Dentro del ámbito del transporte de mercancías, el uso de toda esta información y las tecnologías Big Data nos permitirá reducir y optimizar los tiempos de las entregas, mejorar la planificación de las rutas, anticiparnos a las congestiones de tráficos, reducir así el impacto medioambiental, conocer tendencias y patrones de comportamientos, mejorar la eficiencia y sostenibilidad, …. Y todo ello, en tiempo real!
En otro sentido, el Big Data es el punto de partida que ayudará a convertir nuestras ciudades en inteligentes (conocidas como “smartcities”) mejorando los servicios y la calidad de vida de los ciudadanos, a través de la información que proporcionan nuestros teléfonos móviles, tarjetas de transporte público, cámaras de control de tráfico, nuestras redes sociales, sensores, información meteorológica,…. Predecir los atascos y gestionar el tráfico en tiempo real, que nuestro coche nos informe de las plazas de aparcamiento disponibles, adecuar el transporte de viajeros en función de la demanda real en cada momento, la optimización en la gestión de los residuos, el alumbrado inteligente,… serán nuevos servicios que sin duda contribuirán a una mejora en nuestra calidad de vida.
Las expectativas para el Big Data son muy optimistas, será un negocio que superará los 5.500 millones de euros en 2018, lo que sin duda obligará a las empresas españolas a invertir en estas tecnologías y transformar el análisis de sus datos en estrategia empresarial incrementando así su productividad. Sólo en los próximos 6 años las previsiones apuntan que se generan más de un millón de empleos en este sector.
En definitiva, esto no ha hecho nada más que empezar y sin lugar a dudas el término “BIG DATA” en poco tiempo se nos quedará pequeño.